ADIÓS MUSA

Y fue tanto lo que te estuve reteniendo que no me di cuenta, ni mis letras tampoco.  Que tú ya no eras, que no fuiste, que nunca has sido nada de aquello que mi ingenuo sentir había erigido, tardé demasiado tiempo sangrando cada letra, negándome a la evidencia de tu mentira, a la levedad de lo ilusorio que mi sentir abastecía.